"Carta abierta del Lic Ernesto Vera Rodriguez al Dictador sustituto Raul Castro"Por Evelyn Lahera Ramos,Periodista Independiente.

jueves, 5 de agosto de 2010

 
Posted by Picasa
(Evelyn Lahera Ramos,Periodista Independiente)


Santiago de Cuba, 3 de agosto-(Aplopres) En el día de hoy el Lic. Ernesto Vera Rodríguez visitó varias instancias gubernamentales como la Fiscalía Municipal, Fiscalía Provincial y la Oficina Provincial de Inspección del Trabajo, aquí en Santiago de Cuba.

En todas estas instancias el Lic. Vera había realizado denuncias sobre los actos de corrupción y violaciones de la ley que cometían impunemente las autoridades del Instituto Superior de Ciencias Médicas en Santiago de Cuba, quienes lo expulsaron de su trabajo por disposición de la Policía Política.

Según relata el propio Lic. Vera Rodríguez, todas sus apelaciones fueron denegadas. Mientras que recibía serias amenazas, por las acusaciones realizadas por él, advirtiéndole que podría ser procesado por realizar dichas denuncias, como la formulada a la Dra. Cecilia Melián Savignón.

“Este es un derecho ciudadano que yo tengo, pues el artículo 63 de la Constitución de la República de Cuba los obliga a darme una respuesta, algo que no han hecho a pesar de que mis acusaciones estaban acompañadas de pruebas muy contundentes. Esto fue hace más de 8 meses y aún ellos no me han dado respuesta”. Expresó Vera.

Ante esta situación, en el día de hoy decidió no guardar más silencio, ante tanto atropello y decidió entregar en las instancias gubernamentales una Carta Abierta a Raúl Castro Ruz y demás instancias, exigiendo que terminen de dar respuesta a su caso.

El Lic. Ernesto Vera Rodríguez es el Director del Centro de Estudios Estratégicos para la Democracia Proactiva en Santiago de Cuba. Sito en: José Antonio Saco # 1255 entre 6 y 7 Reparto Santa Bárbara, Santiago de Cuba, Código Postal 90300, Cuba.

TEXTO DE LA CARTA DE ERNESTO VERA RODRÍGUEZ

Santiago de Cuba, 3 de agosto del 2010.

A: Raúl Castro Ruz. Presidente del Consejo de Estado.

C.C: Ricardo Alarcón de Quesada. Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.

C.C: Fiscalía General de la República.

C.C: Fiscalía Provincial de Santiago de Cuba.

C.C: Fiscalía Municipal de Santiago de Cuba.

C.C: ONIT Santiago de Cuba.

Por este medio, hago llegar mi denuncia contra todas las autoridades gubernamentales que han actuado en mi caso de forma tan despiadada.

El 26 de noviembre de 2009, fui expulsado arbitrariamente de la Facultad de Medicina No. I de Santiago de Cuba, donde ocupaba el cargo de Jefe del Departamento de Cuadros e impartía la docencia a estudiantes de primer año de la carrera de medicina. Se me imputaron hechos falsos, distorsionados, por supuestas violaciones de la seguridad informática. Allí se atacó mi privacidad, se invadió mi intimidad y fui discriminado entre otros motivos, por mis opiniones políticas. Una prueba del verdadero motivo es que después y antes de yo ser expulsado se detectaron violaciones similares y hasta peores en las cuentas de Internet de profesores que tienen incluso cargos a nivel del Partido y ellos no fueron siquiera molestados ni recibieron el trato tan cruel e ilegal que recibí yo.

En mi caso la Administración violó la legislación siguiente:

Artículos 9, 14, 41, 42, 43 y 45 de la Constitución de la República.

Artículo 4 del Código de Trabajo.

Artículos 17, 19 y 54 del Decreto – Ley 196/99.

Artículo 130 de la Resolución No. 8/2005 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

Dictamen No. 422 del 2004 del Tribunal Supremo Popular Cubano.

Artículos 90, 99 y 100 de la Resolución 127/ 2007 del Ministerio de la Informática y las Comunicaciones.

Con estos antecedentes y aportando todos los elementos y pruebas presenté incontables Recursos de Quejas y Apelaciones ante los Tribunales de Justicia , el Ministerio de Salud Pública, la Contraloría General de la República, el Partido Provincial de Santiago de Cuba, y la Fiscalía. Sin embargo todas estas instancias lo único que hicieron fue convalidar la injusticia cometida con argumentos tan débiles como viles.

Presenté también graves denuncias contras las autoridades del Instituto Superior de Ciencias Médicas en Santiago de Cuba, incluyendo a su Decana Dra. Cecilia Melián Savignón, para la cual no existe más ley que su voluntad. Allí, en ese lugar desde el cual se me expulsó, amenazó y coaccionó cobardemente se realizan con total impunidad pagos no ajustados a la legislación vigente, se viola la Política de Empleo y de Cuadros, se permiten y toleran robos masivos de computadoras en los laboratorios donde realizan sus trabajos estudiantes y docentes, sin que se hayan tomado medidas verdaderamente efectivas y justas para cada caso, a tal punto que los robos han continuado; denuncié también como en la Facultad de Medicina No. I se otorgan categorías docentes sin que estén presentes todos los requisitos que establece la Resolución No. 128/ 2006 del Ministerio de Educación Superior, unas veces por amiguismo y otras por puro parentesco; así como violaciones constitutivas de delitos, según lo prevé el Código Penal Cubano.

Le relataré brevemente que suerte han corrido las denuncias que he formulado:

Contraloría General de la República: Ante este Organismo que usted creó con tantos bombos y platillos presenté yo mis denuncias, y sabe usted qué hizo la Contralora General de la República, en vez de investigar por sí misma el caso y realizar un profundo análisis, remitió sin más el caso al Ministerio de Salud Pública y las investigaciones fueron llevadas a cabo por una funcionaria del Viceministerio Docente de Salud Pública, es decir, que pusieron la Iglesia en manos de Lutero. Aún espero por la respuesta que debe darme este organismo y ya han transcurrido más de 8 meses.

ONIT: Desde noviembre del 2009 viene diciéndome que el caso no era de su competencia y que como las acusaciones eran tan graves ellos habían decidido pasarlo a la Fiscalía Provincial de Santiago de Cuba. Han pasado más de 8 meses y la Directora de la ONIT y su Asesor Jurídico repiten la misma historia, impunemente se han negado a hacer un trabajo al que están obligados si se revisa someramente cuáles son las funciones de la ONIT y entre ellas está el velar e inspeccionar cualquier violación en materia de Política de Empleo y multar a los responsables.

Policía Nacional Revolucionaria (PNR): Allí presenté dos denuncias la No. 17125/09 y la No. 558/ 2010 por los delitos de Coacción y Abuso de Autoridad respectivamente. Este órgano del Ministerio del Interior archivó las denuncias a pesar de las pruebas irrebatibles que fueron presentadas por mí.

Fiscalía Municipal y Provincial de Santiago de Cuba: Además de no haber velado por el cumplimiento de lo que la Constitución de la República establece, ratificó cada decisión tomada por la PNR, en franca violación de lo que establecen nuestras normas y ni siquiera supo fundamentar de forma categórica sus planteamientos, fue omisa en cada una de las respuestas que me dio, ya que existieron múltiples aspectos de mi apelación que no fueron por ella investigados y ni siquiera esbozados en su decisión final. En la respuesta que me diera la Vice Fiscal Jefa Municipal Mariuska Vega Deschamps, aparece consignado en el último párrafo y cito: “En sus escritos planteó irregularidades que han tenido lugar en el Instituto relacionadas con posibles violaciones administrativas, en este sentido le informamos que de ellas se les dio traslado al grupo de Verificaciones Fiscales como información previa para futuras acciones de control.”

A pesar de lo dicho por esta profesional, han pasado ya 7 meses y no se ha realizado acción alguna ni se me ha dado la debida respuesta tal y como lo establece el artículo 63 de la Constitución de la República.

No crea usted que realicé las denuncias de forma oportunista, pues antes de asumir el cargo y ya en el ejercicio de mis funciones alerté en reiteradas ocasiones de las violaciones sistemáticas que se cometían en la Facultad de Medicina No. I, realizando incluso varios Informes que fueron entregados a la Administración y al núcleo del Partido en sus diversas esferas en fechas 22 de enero de 2009 y 16 de febrero del 2009. A cambio de esto recibí amenazas, hostigamiento e interferencias de todo tipo en mi desempeño profesional. He sido torturado psicológicamente durante el sucio proceso que se me siguió.

He acudido en varias ocasiones a la sede de la Fiscalía Municipal de Santiago de Cuba, para plantearle mis argumentos e inconformidades y ésta se ha negado a recibirme, poniendo siempre por el medio cualquier pretexto a través de su secretaria.

Hago un llamado al pueblo cubano y a la comunidad internacional para que atienda particularmente este caso y se cumpla lo que establecen las leyes cubanas que son violadas por sus propias autoridades.

Siento vergüenza de haber trabajado en la Fiscalía Municipal de Santiago de Cuba cuando era aún muy joven, pues he podido constatar que lo que menos allí se hace es proteger los derechos del cubano de a pie.

Se muy bien que por estas acciones que ahora realizo puedo ser sometido a torturas físicas y psicológicas, se muy bien que solo puede esperarme la cárcel y las golpizas callejeras preparadas por la Policía Política; pero nada podrá silenciar mi opinión, este clamor de justicia. Soy consciente de que nosotros los cubanos somos responsables de nuestra propia historia.


Usted dijo en su último discurso que la Revolución es generosa. Yo tengo 30 años, soy abogado de profesión y he visto todas las injusticias que en mi país se cometen con todos los ciudadanos, y contra todos los procesados no solo los políticos, sino también hacia los comunes, éstos últimos no son abordados muchas veces por la prensa extranjera pero igual son víctimas de este sistema totalitario. No veo la generosidad que usted vislumbra sin motivo ni razón, quizás se refiera usted a la generosidad que lo llevó a votar a favor de la ejecución de tres jóvenes cubanos en el año 2003 por el sólo hecho de querer huir de tanta miseria y desesperanza, ellos eran muy jóvenes y no tuvieron la oportunidad de disfrutar siquiera de un debido proceso con todas las garantías, tan superficial y prefabricado fue el caso de estas víctimas que el Consejo de Estado se tomó solo horas en decidir la suerte de tres jóvenes cubanos. O quizás usted se refiera a la generosidad que lo llevó a encarcelar 75 opositores políticos en la primavera negra del año 2003. Ellos padecieron un infierno en las mazmorras a los cuales el régimen cubano les envió a cumplir su condena. Jamás lo vi a usted ni a Ricardo Alarcón abogando por la mejora de las condiciones carcelarias de los 75 disidentes cubanos, jamás puso usted un reportaje en los medios de comunicación que reflejara fielmente las condiciones infrahumanas en que estos palidecían lentamente. No es generoso un sistema que permite que hayan tantas personas pidiendo limosnas en las calles y que no reciben una ayuda efectiva por parte del Estado cubano, y ni qué hablar de las condiciones en que se encuentran nuestras calles aquí mismo en Santiago de Cuba, desbaratadas una y otra vez, sin que acabe de terminarse ese amplio arreglo en el acueducto y alcantarillado que lleva ya tantos años en ejecución.

Hemos sido generosos con la autopista nacional. Si ha viajado usted por las carreteras de la Habana a Santiago ha visto seguramente un cartel que culpa al bloqueo de que no se haya podido terminar autopista nacional. Da vergüenza que se le quiera achacar al embargo la construcción de nuestras carreteras después que el gobierno que ahora usted preside lleva 50 años en el poder.

No me alejaré más de mi caso en cuestión, sólo le he escrito para comunicarle mi decisión de exigir mis derechos hasta las últimas consecuencias, no le pido su generosidad sino que atienda con profundidad mi caso y no lo delegue en otra persona o institución de las que ya mencioné anteriormente.

Desgraciadamente en nuestro país, aún persiste la discriminación por motivos de religión, opinión política y orientación sexual. Seguimos siendo víctimas de prejuicios y la falta de privacidad se ha convertido en una constante.

Yo no tengo medios de subsistencia desde hace 9 meses, llegué hasta realizar una huelga de hambre en reclamo del puesto de trabajo del cual fui expulsado. Usted exige justicia para los 5 cubanos condenados por espionaje. Yo no soy Dios para juzgar a nadie, pero después de haber estudiado con suma profundidad el llamado caso de los 5, debo reconocer que ellos fueron juzgados con garantías procesales que hoy son inexistentes en nuestro sistema de justicia.

Tengo fe en que usted finalmente haga las reformas que nuestro pueblo le demanda, no es solo la miseria que nos traga, sino la falta de libertad, el no poder respirar un aire que no esté contaminado por la censura. Pido a Dios todos los días para que ilumine su mente y la de sus asesores y no sostenga más una ideología o proyecto a costa del sufrimiento de millones de cubanos. Usted es padre, debe imaginarse entonces el sufrimiento de los que al igual que usted tienen hijos que son víctimas del odio y el prejuicio. Y recuerde que la PATRIA ES DE TODOS, para eso lucharon Félix Varela y José Martí. La Patria no es solamente de la mayoría o de la minoría que defiendan tal o más cual ideología.

Desde ahora realizaré protestas públicas en respuesta a este nuevo ultraje.

Yo no fui escuchado en medio del proceso que se me siguió, un proceso en el cual ni siquiera se me permitió presentar pruebas, ojalá usted se tome el mismo interés en mi caso. Yo también soy un cubano, solo que esta vez usted no tendrá que demandar justicia al “despiadado vecino del norte”, sino a las mimas instituciones creadas y sostenidas por su gobierno.

En espera de su respuesta

Lic. Ernesto Antonio Vera Rodríguez.-Abogado. Director del Centro de Estudios Estratégicos para la Democracia Proactiva “José Ignacio García Hamilton”. Director de la Biblioteca Independiente Dulce María Loynaz; y miembro de la corriente agramontista de abogados independientes de Cuba. Teléfono 646333

Dirección particular: José Antonio Saco # 1255 entre 6 y 7 Reparto Santa Bárbara, Santiago de Cuba.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
 
 

Archives