martes, 20 de julio de 2010
(Foto Archivo)
Según el decir del Periodista Fernando García, corresponsal en Cuba del diario La Vanguardia, la liberación de presos políticos por parte del gobierno cubano, “descoloca a la disidencia y obliga a redefinir el discurso opositor”.
Amigo, cuando a mediados de marzo de 2003 el gobierno cubano lanzó aquella redada conocida como “La Primavera Negra de Cuba” y encarceló a más de setenta y cinco opositores, en aquella época, la lucha de los opositores nativos se centraba en conseguir para el pueblo de Cuba libertad, democracia y respeto para los Derechos Humanos de los cubanos, violados reiteradamente por la dictadura castrista y denunciados día a día por los Periodistas independientes y los activistas, desde todos los rincones de la isla y divulgados a través de todos los medios de difusión posibles, entre ellos, por las vigorosas emisoras Radio y TV Martí.
Estas encarcelaciones fueron hechas para acallar aquellas voces que ya habían definido varios proyectos, entre los que se encontraba el Proyecto Varela. Este propugnaba cambios sustanciales en la Constitución de la República que permitieran la pluralidad de los partidos políticos y el cese del monopolio de los llamados comunistas sobre las demás ideologías. Dicho proyecto consiguió reunir más de cuarenta mil firmas entre la población cubana, necesarias para el llamado a la realización de un plebiscito que consiguiera la implementación de los reclamos exigidos.
Varios otros opositores habían enunciado el documento La Patria es de Todos, denunciando el monopolio de la dictadura totalitaria sobre la vida de los cubanos. Esto costó penas de cárcel a varios litigantes y su declaración como Prisioneros de Conciencia. Pero incluso ya en esta fecha,se habían realizados múltiples proyectos para conseguir la unidad, de las huestes opositoras entre los que se encuentra el llamado Concilio Cubano, que fueron frecuentemente saboteados por los agentes de la dictadura infiltrados dentro de las organizaciones contestatarias.
Aquella redada la realizó la tiranía castrista para amedrentar al pueblo y procurar así que cesara en sus constantes reclamos. Hoy simplemente podemos constatar que la dictadura aún permanece con vida, porque que sepamos no ha renunciado a su maldad, solo que nuestras múltiples luchas han producido un pequeño resultado, no más.
Por lo tanto, lo que debemos hacer es seguir luchando para conseguir lo que llevamos más de cincuenta años reclamando: Libertad, democracia y respeto por los derechos humanos de todos los cubanos y hasta el fin de la dictadura castrista y fascista que desangra a nuestra querida patria y nuestra entrañable isla de Cuba.
Como usted ve, Señor Fernando García, no hay nada que redefinir, ni se nos ha movido el suelo. Lo que sí se ha movido es el piso de la dictadura, que se tambalea como en un terremoto por la acción decidida y heroica de los opositores cubanos, que tienen como su buque insignia a las indomables, Damas de Blanco y como su más enhiesta bandera, al mártir de todos los cubanos, el intransigente, Orlando Zapata Tamayo y como bien sabe usted, ¡Zapata Vive!
Y esta dictadura fascista que perdura en Cuba por más de cincuenta años, será derribada para siempre por el pueblo cubano y esto, mucho más temprano que tarde. No lo dude.
"No hay nada que redefinir"Por hector Julio Cedeño Negrin.Periodista Independiente.
Publicado por Unknown en 8:49
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